El patrimonio de edificios de acceso público e instalaciones abiertas al público de un promotor es muy variado y heterogéneo: tipos de actividad, tamaños, fechas de construcción y renovación, equipamientos disponibles, nivel de confort...
Adecuar su patrimonio a las condiciones de accesibilidad es, ante todo, aportar mejoras en los espacios construidos para responder a las necesidades de los usuarios, los clientes... en situación de discapacidad. Pero, es también responder a las limitaciones técnicas, funcionales, estéticas y presupuestarias definidas por el promotor.
Una adecuación de éxito se traduce en un despliegue de soluciones sencillas, homogéneas y coherentes.